¿Qué es la higiene íntima?
Una higiene íntima diaria es clave para sentirte cómoda y reducir el riesgo de infecciones; y más en esta etapa en la que la zona vaginal se ve directamente afectada por los cambios hormonales. La vagina realiza por sí misma una actividad de autolimpieza: cada día genera un flujo blanquecino (flujo vaginal) que sanea las paredes vaginales.
Además, el nivel de acidez de este flujo vaginal (llamado pH vaginal) contribuye a prevenir posibles infecciones. Por eso, si se altera, puede provocar infecciones, la aparición de sequedad, picor y dolor al mantener relaciones sexuales o al orinar. Lo más recomendable es pedir consejo a tu médico si aparece alguna de estas molestias.